Playa de La Zurriola (Playas, Playas e islas en San Sebastián / Donosti)
Con 800 metros de longitud y 110 de ancho, la playa de La Zurriola se enclava en el barrio de Gros, entre la desembocadura del río Urumea y el monte Ulía, siendo la más frecuentada por los jóvenes y todo un referente europeo en la práctica del surf. Cuenta con infinidad de servicios y comodidades que hacen de ella una playa urbana a la altura, un paraje de ensueño donde las aguas cristalinas, las arenas doradas y el sensacional paisaje de Donostia convierten su visita en una experiencia inolvidable.
Las olas de esta magnífica playa rompen de derecha a izquierda, con secciones de bucles, y prácticamente sin interrupción durante todo el año. Semejantes características hacen de ella una meca del surf, que entre los aficionados a este deporte constituye además el seno de una leyenda, el "Pico de Gros". Esta formidable ola se producía a media marea y alcanzaba los dos metros de altura. Poco antes de romper se abría con elegancia, majestuosa, parecía que desplegara sus alas. Todo un mito para un lugar mítico, que anualmente se convierte en el marco de numerosos eventos y campeonatos de surf.
De sustrato arenoso y amplia apertura al mar, La Zurriola es una de las playas con mayor oleaje de la costa cantábrica, aunque no siempre fue así. En un principio las playas de La Concha, Ondarreta y La Zurriola eran una sola, hasta que el istmo del monte Urgull (por entonces una isla), separó a esta última de las demás, otorgándole ese carácter aislado que constituye su mejor seña de identidad.
Para comprender la actual configuración de La Zurriola tenemos que remontarnos a 1995. En el siglo XIX se daba un uso reducido a la playa, dada la violencia de sus aguas. Es a partir de la primera década del siglo XX cuando regristramos un verdadero interés turístico, en parte por la proliferación de hoteles. Sin embargo, el problema de la contención de la aguas persistiría hasta 1994, fecha en que se produce una remodelación íntegra de la arena, las aguas y los servicios, mejorándose sustancialmente su calidad. Como consecuencia del convenio entre el Ayudantamiento Donostiarra y el Miniterio de Obras Públicas, se construye el espigón. No solo reduciría la virulencia de la playa sino que también ampliaría considerablemente su longitud.
Tanto es así que La Zurriola alcanzaba por entonces la Calle de Zabaleta y hoy se extiende hasta el Punta Mompás.
Limitada por el Paseo de José Miguel Barandiarán, la plaza del Padre Claret y la Avenida de La Zurriola, la playa acoge un paseo extraordinario que se inicia en la zona de Sagués y concluye en los célebres Cubos de Kursaal, del arquitecto Rafael Moneo. Este monumento, que pretende subrayar la armonía entre lo natural y lo artificial, es el lugar donde se dan cita toda clase de ferias y festivales.
Asimismo infinidad de servicios se ponen a disposición del público, desde restaurantes, cafeterías o kioskos hasta servicios para discapacitados, un área de deportes o un escuela de natación, entre otras bondades que hacen de esta playa uno de los destinos turísticos más atractivos de Donostia.
Durante la tercera semana de julio, la capital guipuzcoana acoge el Festival de Jazz de San Sebastián, uno de los más antiguos de Europa. Más de cien mil personas se congregan entonces en la playa de La Zurriola. Un escenario inmejorable, un regalo para los sentidos, donde también la buena música encuentra su lugar.
Fotos relacionadas con Playa de La ZurriolaLas olas de esta magnífica playa rompen de derecha a izquierda, con secciones de bucles, y prácticamente sin interrupción durante todo el año. Semejantes características hacen de ella una meca del surf, que entre los aficionados a este deporte constituye además el seno de una leyenda, el "Pico de Gros". Esta formidable ola se producía a media marea y alcanzaba los dos metros de altura. Poco antes de romper se abría con elegancia, majestuosa, parecía que desplegara sus alas. Todo un mito para un lugar mítico, que anualmente se convierte en el marco de numerosos eventos y campeonatos de surf.
De sustrato arenoso y amplia apertura al mar, La Zurriola es una de las playas con mayor oleaje de la costa cantábrica, aunque no siempre fue así. En un principio las playas de La Concha, Ondarreta y La Zurriola eran una sola, hasta que el istmo del monte Urgull (por entonces una isla), separó a esta última de las demás, otorgándole ese carácter aislado que constituye su mejor seña de identidad.
Para comprender la actual configuración de La Zurriola tenemos que remontarnos a 1995. En el siglo XIX se daba un uso reducido a la playa, dada la violencia de sus aguas. Es a partir de la primera década del siglo XX cuando regristramos un verdadero interés turístico, en parte por la proliferación de hoteles. Sin embargo, el problema de la contención de la aguas persistiría hasta 1994, fecha en que se produce una remodelación íntegra de la arena, las aguas y los servicios, mejorándose sustancialmente su calidad. Como consecuencia del convenio entre el Ayudantamiento Donostiarra y el Miniterio de Obras Públicas, se construye el espigón. No solo reduciría la virulencia de la playa sino que también ampliaría considerablemente su longitud.
Tanto es así que La Zurriola alcanzaba por entonces la Calle de Zabaleta y hoy se extiende hasta el Punta Mompás.
Limitada por el Paseo de José Miguel Barandiarán, la plaza del Padre Claret y la Avenida de La Zurriola, la playa acoge un paseo extraordinario que se inicia en la zona de Sagués y concluye en los célebres Cubos de Kursaal, del arquitecto Rafael Moneo. Este monumento, que pretende subrayar la armonía entre lo natural y lo artificial, es el lugar donde se dan cita toda clase de ferias y festivales.
Asimismo infinidad de servicios se ponen a disposición del público, desde restaurantes, cafeterías o kioskos hasta servicios para discapacitados, un área de deportes o un escuela de natación, entre otras bondades que hacen de esta playa uno de los destinos turísticos más atractivos de Donostia.
Durante la tercera semana de julio, la capital guipuzcoana acoge el Festival de Jazz de San Sebastián, uno de los más antiguos de Europa. Más de cien mil personas se congregan entonces en la playa de La Zurriola. Un escenario inmejorable, un regalo para los sentidos, donde también la buena música encuentra su lugar.
Playa de la Zurriola
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Surf en Donosti
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Esperando la ola perfecta
de Guillermo B.
Olas en el espigón
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Olas junto al Kursaal
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Hora de olas
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Playa de la Zurriola
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Ambiente Zurriola Jazzaldia-2014
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Arreglos tras el temporal
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Piedras del espigón
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Playa de la Zurriola
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Zurriola de noche
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Playa zurriola
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Henry Moore en la Zurriola
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